En estos tiempos de nieve y color blanco recuerdo una cerveza de un sabor un tanto floral cuyo nombre refleja perfectamente su aroma.
Edelweiss
El Edelweiss (Estrella de las Nieves), esa bella flor que sólo nace en los Alpes. Cerveza austríaca suavemene braseada que nos recuerda a viajes entre altas montañas nevadas. De sabor tan cristalino como las aguas glaciares. Como metafóricamente indica la página de esta cerveza: "esta flor representa la pureza, la singularidad y el deseo de poseerla..."
Cuentan también una bella tradición que se ha distorsionado con el tiempo:
"En tiempos, cuando los Alpes aún eran intocables, en Austria existía la tradición entre los jóvenes de coger una flor Edelweiss para su amada y así demostrarla el amor por ella. Sin embargo, dado que el Edelweiss crece muy alto en las montañas, esta no sólo era una ardua tarea sino también peligrosa. Entre tanto, por ser muy rara, el Edelweiss es una planta protegida y cogerla está prohibido. Por tanto, actualmente se está observando en Austria que en vez de la flor, muchos jóvenes presentan a su amor un vaso de cerveza Edelweiss..."
Tal vez un final un tanto publicitario, en busca de nuevas tradiciones por las que beber dicho néctar, pero desde luego a mí me tendrían completamente convencida si se me presentan con una jarra de Edelweiss Weissbier jajajajaja.
Con 500 años de antiguedad, la más antigua de la zona de Salzburg, esta cervecería se halla en Kaltenhausen, un pequeño e idílico pueblo a los pies de Untersberg, en medio de los Alpes.
Valoración personal: Una clara y delicada cerveza que no tiene nada que envidiar a las mejores de Baviera. Un sabor inconfundible, apacible, que hace las delicias de casi todos. Sabor débil que no satura las papilas. Refrescante pero a la vez con cierta fuerza. Como dije, despierta aromas herbales y florales muy adecuados a su nombre, gracias a la elaboración a base de las aguas puras y cristalinas recogidas directamente de los Alpes. No especialmente embriagadora para la cabeza por sus limitados 5º. Perfecta para una tarde en compañía de los amigos en la terraza de un mirador alpino. Como toque español añadiría siempre algo de comer, en este caso galletitas saladas, o pequeños bretzels salados.
Puntuación personal: 8/10
Aprovechando quisiera recordar el lugar donde alguien descubrió esta cerveza y nos motivó a tomarla. Si alguna vez, amantes cerveceros, paseáis por los Champs-Élysées en Paris, y de repente el largo paseo por las interminables avenidas parisinas despierta inicios de sed, en la misma orilla en que se encuentra el taller-museo de la Renault, estad atentos porque aparece ante vosotros
"La Culture de la Bière". Local moderno y bien ambientado, tranquilo con toques contemporáneos donde se pueden degustar varias cervezas (a un precio similar al de cualquier otra cervecería en Francia o a la de cualquiera española que ofrezca este tipo de cervezas) a la vez que puede uno comer pequeñas tapas bien elaboradas, algo chic y en este caso sí que por el precio no esperéis llenar el buche demasiado. Y otro de los atractivos de este bar es la primera planta. Una tienda con cierta cantidad de curiosidades a vender sobre la cerveza, ya no sólo libros y vasos sino también confituras de cerveza y bombones y multitud de otras interesantes elaboraciones (y puedo asegurar que dado que estos fueron mis regalos de cumpleaños en mi estancia en Dreux, tuve la ocasión de probarlos y he de decir que están realmente deliciosos. Cualquiera de las cuatro confituras que probé y también los bombones, por chocante que pueda parecer).
Para más información este chico parece reincidir en mis opiniones y nos detalla la dirección:
http://www.minube.com/rincon/2579Y por supuesto la propia página del bar (evidentemente en francés):
Culture bière
